¡Hola de nuevo!
Ya no os queda nada para ver a vuestros chic@s. Esta semana ya han empezado las despedidas de grupos que se han ido: besos, abrazos, fotos de última hora, regalos…, aunque todos tienen ya el facebook o el twitter para mantenerse en contacto y no olvidar estas tres semanas. Además, todavía no se han ido y ya están planeando quedadas en España. También hemos recibido a nuevos alumnos y algunos tienen “hermanos” nuevos en las casas.
La excursión de esta semana fue a la cárcel de Wicklow y al parque natural de Glendalough. En la cárcel pudimos ver las atrocidades que cometieron hace algunos siglos en esta zona y lo injusta que era la vida por entonces. Vimos cómo vivían, o más bien sobrevivían dentro de la cárcel. Se dice que hay fantasmas, así que más de uno se llevó un susto en las celdas. Después pasamos el resto del día en Glendalough, es un parque natural precioso con dos lagos y la “monastic city”. Nos dedicamos a pasear por el parque, relajarnos, hacer fotos y lamentarnos por no haber llevado los bañadores porque hacía un día perfecto para darse un chapuzón, además el agua estaba ¡caliente! También visitamos las ruinas de la ciudad y vimos un vídeo que nos explicaba la historia de la zona. En la vuelta a casa, Fernando casi hace que se nos salten las lágrimas.
David: “¿A qué te recuerda este bus?”
Fernando: “Al primer día de mi vida”
David: “¿Al primer día de tu vida?”
Fernando: “Sí, al primer día de mi vida porque este viaje es mi vida”.
Claro, todos dijimos: “Oooooooohhhhh”.
Al día siguiente volvimos a Dublín a hacer las compras de última hora y algunos decidimos seguir visitando la ciudad. Entramos en la famosa biblioteca del Trinity College “The Book of Kells” y paseamos por la zona de Temple Bar.
El lunes hicimos un poquito de ejercicio y subimos a la montaña de Bray para comprobar si era cierto que las vistas eran una maravilla, y lo son. Conseguimos ver la escuela y nuestras casas y se hincharon a hacer fotos ahí arriba, cada uno tiene ya un book con mil posturas.
Todavía nos queda un día y medio por Bray en el que tenemos un viaje planeado para visitar el castillo de Dulkey y un ratito de tiempo libre para disfrutar de los últimos minutos por Bray. Ha sido un placer ser la monitora de vuestros chic@s, se han portado de maravilla y me lo he pasado genial con ellos, sé que los voy a echar de menos a todos.
Ester (la monitora).




