Dos consejos: Deja a un lado la vergüenza y «huye» de otros españoles
A lo largo de nuestro viaje en el mundo de los idiomas, en Top School hemos descubierto los dos impedimentos que más obstaculizan el aprendizaje de idiomas: el miedo escénico y rodearse de compatriotas cuando se está en un país extranjero.
Estudiar inglés en Londres, Inglaterra
El miedo escénico es, probablemente, el mayor lastre que nos encontraremos a la hora de aprender inglés o cualquier otro idioma. A menudo, sentimos vergüenza de hablarlo delante de otras personas, sobre todo si son hispanohablantes porque tendemos a comparar nuestro nivel con el de los demás. Eso nos lleva a pensar cosas tan absurdas como “si pronuncio mal, se van a reír de mí” o “si pronuncio demasiado bien, creerán que intento parecer mejor que ellos”.
Por ésta y muchas otras razones, en Top School pensamos que la mejor manera de aprender un idioma es en su país de origen. Practicar un idioma con hablantes nativos nos libera de la carga de comparar nuestro nivel con el de otros, por lo que entran en juego las habilidades lingüísticas en estado puro. Cuando hablamos inglés con un británico, por ejemplo, no nos planteamos si estamos quedando en ridículo o si nuestro acento suena demasiado exagerado. Nuestro único objetivo es comunicarnos, entender y hacernos entender, y todo lo demás queda en un segundo plano.
Por otra parte, aprender un idioma en el país de origen siempre resulta mucho más efectivo que hacerlo en España. El motivo es sencillo: todo lo que nos rodea está en dicho idioma, lo que nos impide desconectar de él en ningún momento del día. Desde que nos levantamos y decimos “Good morning” hasta que nos acostamos antes de decir “Good night”, nuestro cerebro se encuentra inmerso en el inglés, por lo que llega un punto en que ni siquiera nos sale pensar en español de manera natural.
Una vez logrado el objetivo de vivir en un país de lengua extranjera, aprender el idioma resultará mucho más fácil y natural, aunque la rapidez con la que progreses dependerá sólo de ti. La clave del éxito se basa sólo en estos dos sencillos consejos: deja a un lado la vergüenza y no hagas vida con otros españoles.
No te preocupes si cometes errores, nadie nace con el don de hablar varios idiomas. Es un proceso largo, una carrera de fondo: cuanto más hables, más errores cometerás, pero más te corregirán y, en consecuencia, más aprenderás. Cada día descubrirás expresiones nuevas y, poco a poco, irás notando cómo tu nivel mejora sin que te des ni cuenta.
El segundo consejo es fundamental. Podrías vivir en el extranjero durante meses, o incluso años, y estancarte en un nivel básico si todas tus amistades son españolas y el idioma que más practicas es el castellano. Sin embargo, si aprovechas la estancia para conocer gente nativa o de otros países, practicarás el idioma mucho más, tu nivel mejorará notablemente más rápido, y probablemente hagas amistades que no olvidarás jamás. Para ello en Top School no podemos ponértelo más fácil: todas nuestras escuelas son multiculturales, por lo que tendrás decenas de compañeros de múltiples nacionalidades con los que convivir. No lo dudes, vive la multiculturalidad y tú serás el mayor beneficiado.
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