Hoy se nos han quedado las sábanas semi-pegadillas pero, al menos, hemos llegado a tiempo a desayunar. Cuando los alumnos han terminado sus tres horas de inglés les he repartido el dinero que necesitaban y sus respectivos teléfonos móviles.
A la hora de come,r la cocina nos ha sorprendido con una tiernísima ensalada cuyos ingredientes eran del huerto de una de las cocineras y un riquísimo plato de pollo frito con ajos acompañado de patatas fritas. De postre nos han servido una sandía que estaba muy fresca y muy dulce.
Cuando hemos acabado de comer, y después de hacer la digestión, hemos organizado nuestro “Murdered game”. Este juego consiste en repartir tres tarjetas por participante en las que están escritas el nombre de la persona a la que hay que matar, el lugar en el que hay que hacerlo y el objeto con el que hay que hacerlo. Muy divertido. Diez minutos después comenzaron los primeros asesinatos y así se sucederán hasta el último día de campamento.
Una vez que todos los alumnos ya tenían sus respectivas papeletas, nos hemos ido a realizar la Vía Ferrata. En esta actividad los alumnos tenían que escalar una montaña con unos hierros que hacían la función de escalones y, agarrándose a una cuerda, sujetados con arneses, debían subir montaña arriba. Han acabado muy, muy, muy cansados, pero les ha gustado mucho la actividad. Cuando hemos acabado hemos ido a La Charca y, puesto que los alumnos mayores ya realizaron ayer barranquismo (y, por lo tanto, han aprendido cómo caer al agua desde una gran altura), se han tirado por la famosa piedra alta de 7 metros hasta el agua. No os podéis imaginar lo contentos que estaban y lo orgullosa que yo estaba de ellos. La verdad es que están aprendiendo mucho.
Sobre las 8 hemos vuelto al campamento para ducharnos antes de ir a cenar. Hoy ha tocado ensalada con tomates y pepinos, ensaladilla rusa y pescado rebozado. De postre había yogurt y, algunos niños creo que han batido el récord de mayor número de yogures comidos en una noche.
Después de lavarnos los dientes y de haber hablado con nuestras familias por teléfono, hemos empezado la actividad de noche “English games”. El primero de los juegos fue “Pass the parcel”; a los niños les encantó. Tanto los profesores como yo nos hemos quedado muy asombrado viendo la cara de los niños durante el desarrollo de este juego. Era como si todos tuvieran unos 8 años, como si los alumnos mayores ya no fueran mayores. Muy, muy, muy divertido. El siguiente juego fue “All those who…” que también tuvo mucho éxito porque los niños no querían dejar de jugar. Aunque bueno, la tensión de poder conseguir una chuchería dependiendo de la música y mientras quitas capas de papel, no tiene precio. Cuando ya acabamos de jugar nos fuimos a la cama ya que estábamos cansadísimos.
