
Quinto día, viernes 20 de julio
Esta mañana hemos tenido la divertida sorpresa de ser despertados por Patricio; el amigo inseparable de Bob Esponja. Hasta a l@s mayores del campamento les ha divertido la sorpresa.
Cuando han acabado de desayunar y de asearse han comenzado las clases. Dos de los grupos están muy nerviosos porque esta noche representan su obra de teatro, así que han aprovechado parte de la clase para ultimar los pequeños detalles de la puesta en escena y del diálogo que tienen que aprenderse para esta noche.
Cuando han acabado las clases, los alumnos han ido a cobrar el banco y después a comer. Hoy tocaba sopa de cocido, cocido completo y fruta; el cocido estaba muy, pero que muy, bueno.
Después de comer y lavarse los dientes han tenido una horita libre antes de ir a realizar las actividades de tarde. Al igual que hicimos el miércoles, hoy tocaba circuito de multiaventura y tirolina, pero esta vez los dos grupos realizaron la actividad que no hicieron el miércoles. Así, el grupo de l@s chic@s mayores ha hecho tirolina y l@s más peques han disfrutado del circuito multiaventura.
Se lo han pasado muy bien realizando estas actividades y, de nuevo, l@s mayores demostraron qué valientes son y l@s peques no se quedaron cortos escalando un puente tras otro.
Cuando han acabado se han ido a las duchas y a cenar. Después de tomarse la ensalada, el pollo al horno, las patatas asadas y la fruta, los alumnos de Paul y de Alena fueron corriendo a lavarse los dientes y a prepararse para su actuación.
El grupo de Alena interpretó Peter Pan, mientras que el grupo de Paul representó La Cenicienta. Como suele pasar siempre, en mitad de las representaciones, hubo ataques de risa por parte de los actores, aunque esto no impidió que las obras de teatro salieran mejor de lo que los profes esperaban.
En cuanto acabaron las representaciones y cada un@ de l@s peque pudo disfrutar de su momento de gloria, nos fuimos a la cama.
Sexto día, sábado 21 de julio
¡¡¡Nos vamos de excursión!!!
Esta mañana nos hemos levantado, hemos ido a desayunar y, después de asearnos, nos hemos montado en el autobús dirección Alicante.
Hemos ido a visitar el Castillo de Santa Bárbara y la playa de El Campello. Nos explicaron la historia del Castillo con sus guerras, sus leyendas y sus supersticiones. La leyenda de “La cabeza del moro” fue la que más impactó a l@s chaval@s. Estuvimos paseando por la fortaleza y por los calabozos y visitamos los museos que levantaron sobre las ruinas del Castillo.
Cuando hemos acabado de visitar el Castillo de Santa Bárbara hemos ido a la playa de El Campello. Después de comer allí y de pegarnos un remojón, nos fuimos paseando hasta los puestos de hippies de San Juan. Aquí, la mayoría de l@s alumn@s se compraron algo o compraron regalos para papá, mamá, hermanitos, hermanitas, abuelitos, abuelitas, etc.
En cuanto hemos llegado de la playa, un@s se han ido a la ducha y otr@s a llamar a sus padres.
Después de cenar (ensalada, crema de zanahorias, tortilla de patata y yogurt) han ido eligiendo, por grupos, las canciones que iban a cantar esta noche en nuestro karaoke.
Tod@s participaron en el karaoke. Quedé bastante sorprendida cuando vi que tod@s y cada un@ de ello@s iba a participar, en grupos, pero que tod@s cantarían. Los profesores se lo pasaron bomba improvisando coreografías mientras l@s chic@s cantaban. Las canciones estrella fueron: Umbrella, Dancing Queen y las de High School Musical. Much@s de ell@s quedaron muy content@s tras descubrir la letra de algunas de las canciones que llevan años cantando. Normalmente se dedican a repetir la fonética que escuchan en las canciones sin saber lo que realmente dicen. Pero anoche, al hacer el karaoke, entendieron muchas de las letras de las canciones que les gustan.
Cuando se cansaron de cantar, que fue sobre las 23:45, nos fuimos todos a dormir. Había sido un día muy largo, así que el silencio de la noche no tardó en adueñarse del campamento.
Séptimo día, domingo 22 de julio
Debido a lo cansad@s que estábamos por el día que tuvimos ayer: excursión, playa, paseo, playa de nuevo, etc., hoy nos ha costado levantarnos de la cama. Pero una vez que hemos ido a desayunar, ya hemos abierto los ojos.
Cuando han acabado de desayunar, han ido a lavarse los dientes y después a clase. Los grupos de Paulo y de Dustin ya han comenzado a preparar sus obras de teatro ya que su función tendrá lugar el próximo jueves.
Cuando han acabado las 3 horas de clase y han ido a cobrar el banco, nos hemos sentado a comer: canelones de carne, merluza a la vasca y fruta.
Una vez que han comido, se han lavado los dientes y han disfrutado de su horita libre, nos hemos ido a realizar las actividades de tarde organizadas para hoy: piragüismo con zódiac (l@s mayores) y rocódromo (l@s peques). Se lo han pasado genial. De hecho l@s mayores hicieron lo posible por tirar a los profes al lago.
Cuando tod@s realizaron las actividades organizadas para esta tarde, se fueron a la piscina a refrescarse y a jugar un rato. Después fueron a las duchas y a cenar ensalada de verano, magro con tomate y fruta.
Después de cenar y de asearse, fuimos a realizar la actividad que habíamos organizado para esa noche: Olympics night. Se lo pasaron bomba. Est@s chic@s tienen un gran afán por la victoria.
Dividimos a los alumnos en función a las clases de inglés para que cada profesor pudiera explicar a su grupo de alumn@s lo que debía hacer, y también para ayudarles a conseguir la victoria. Los profesores comenzamos la actividad con nuestra propia bandera y nuestra propia antorcha de los Juegos Olímpicos. La verdad es que se rieron mucho del ridículo que hicimos interpretando el recorrido de la antorcha hasta su destino.
Una vez que los profesores habíamos hecho nuestra introducción, comenzaron los juegos. Tuvimos carreras a la pata coja, con un pie atado al compañero, con una cuchara y huevo cocido, caminando hacia atrás, con sacos, haciendo la carretilla, etc. Es decir, un gran número de carreras muy singulares. Cada vez que apuntaba el puesto en el que había quedado cada grupo tras una carrera, aquéllos que no quedaban primero se me tiraban al cuello. ¡Madre mía, qué rivalidad! Esto me demostró que estaban totalmente entregados a la actividad. Aunque también debo confesar que el primer premio eran KitKats y unas medallas de oro caseras. El segundo y el tercer puesto recibieron también medallas caseras, pero de plata y de bronce respectivamente.
Cuando acabamos la actividad, que se alargó más de lo que pensábamos (algo que a l@s chic@s les entusiasmó), nos fuimos a dormir.
Octavo día, lunes 23 de julio
Al igual que ayer, hoy nos hemos levantado, hemos ido a desayunar y después de asearnos, a clase. Cuando hemos terminado las clases hemos realizado el banco y hemos ido a comer: potaje de garbanzos, Mc nuggets con ensalada y fruta. Justo después de lavarnos nos dientes nos hemos ido a realizar la actividad de hoy: excursión de medio día a la bolera y visita a la ciudad de Elche.
En cuanto llegamos a la bolera y nos repartimos en grupos, nos pusimos a jugar. Me sorprendió la gran cantidad de chic@s que no había jugado nunca a los bolos, aunque much@s de ell@s tuvieron la suerte del principiante.
En cuanto acabamos vino el autobús a recogernos para llevarnos al centro de Elche. Aquí visitamos la Torre de la Basílica de Santa María. Después de subir los 170 escalones que te llevan hasta la azotea de la torre, much@s de los chic@s quedaron impresionados por las vistas. A pesar de ser una zona desértica, la imagen de las palmeras desde las alturas da la sensación de estar en medio de un oasis.
Tras la visita a la Torre nos fuimos a pasear por el casco antiguo de Elche. Algun@s alumn@s compraron helados y l@s mayores se compraron un modelito para estrenar la última noche.
Cuando llegamos de vuelta al campamento nos fuimos directos a cenar arroz a la cubana, salchichas con ensalada y yogurt. Una vez que habíamos cenado, fuimos a ducharnos y a lavarnos los dientes.
Hoy tocaba Gymcana Pirata como actividad de noche, pero por petición popular, se cambió a disco. Es decir, los alumnos hicieron un consenso para hablar conmigo y pedirme, en nombre de l@s acampad@s, si podían tener disco esa noche. Así que no pudimos sucumbir a sus encantos, y así lo hicimos. Se lo pasaron bomba en la pista de baile. La hora y poquito que estuvimos bailando no hicieron ni un descanso.
Después de seguir las coreografías de los profes o el estilo libre de los más independientes, nos fuimos a la cama.




Magníficos programas y magnífica información.
Gracias y saludos.
Rubén Candela.