Queridas familias, amigos y amigas,
Como os contamos en nuestro artículo anterior ya hemos comenzado las clases. Nuestro programa, en el que participan jóvenes de varias nacionalidades, se llama Young Leaders programme y tiene como principal objetivo dotarnos de herramientas comunicativas: hacemos exposiciones orales sobre temas de actualidad y fundamentalmente desarrollamos las habilidades de producción de lengua, speaking y writing, con el fin de mejorar nuestro nivel de expresión y nuestra confianza a la hora de usar el inglés como herramienta de trabajo.
Después de las clases realizamos cada día una actividad diferente:
El martes fuimos a una de las muchas zonas verdes de la ciudad: Evergreen Brickworks. Se trata de la antigua cantera e industria del ladrillo de Toronto y fue allí donde se manufacturaron los ladrillos que se utilizaron para la edificación de lugares tan emblemáticos como Osgoode Hall (el juzgado del que os hablamos la semana pasada) y Casa Loma (que visitaremos hoy). La industria se estableció en 1889 y fue productiva durante más de un siglo. Tras su cierre, lejos de convertirse en un lugar abandonado se recicló en parque. La cantera fue rellenada con agua y es el lago de los lirios de agua junto al que nos veis posar. Por su parte, la fábrica se reconvirtió en centro de estudios y alberga numerosos talleres de ecología, siendo el patio empleado para un mercadillo semanal de productos ecológicos y para un taller permanente de agricultura para niños y jóvenes. Además se imparten talleres gratuitos de mantenimiento y reparación de bicicletas. Y es que una de las cosas que más nos gustan de Toronto es que apuesta por la sostenibilidad de manera activa y muy consciente. El panel en el que nos veis representa un mapa de la ciudad, y en él cada arbusto del jardín vertical que lo adorna representa los principales ríos y acuíferos de la ciudad. Por último, también en Evergreen subimos una colina en la que nos veis posando con el slyline de Toronto al fondo, un paseo caluroso y empinado pero que ciertamente valió la pena.
Miércoles visitamos el distrito financiero, donde se encuentran los principales bancos de la ciudad y que está plagado de impresionantes rascacielos. Toronto es un lugar abierto y como tal nos permiten la entrada a uno de estos rascacielos donde nos veis posar con un impresionante fondo de techo acristalado. A continuación, de camino al tranvía nos sorprenden dos cosas: un mercadillo de artesanías y verduras biológicas y el rodaje de una peli de acción. Como somos muy curiosones, alguno se asoma y llega a ver al actor de Capitán América. No nos dejan mirar mucho pero es impresionante ver los coches de policía de Nueva York, la ambulancia y la famosa furgoneta S.W.A.T., es muy hollywoodiense todo y es que, al fin y al cabo esto es América.
Finalmente llegamos a Distillery District, de nuevo una zona reconvertida. Lo que en su día albergó las destilerías de la ciudad es a día de hoy un precioso conjunto de galerías de arte, tiendas vintage y cafeterías. En una de ellas decidimos combatir el calor sofocante con un delicioso gelato que nos deja a todos con cara de felicidad. Es en esta zona donde nos veis posando sobre esculturas y frente a cuadros.
El jueves toca visitar el ROM, Royal Ontario Musuem, el cual exhibe arte de culturas antiguas tan diversas como China, Egipto, Bizancio, Grecia, Roma y Korea, y es que Toronto (que significa lugar de reunión) es una ciudad orgullosa de su origen multicultural cuyo patrimonio se nutre de todas las culturas del globo. También visitamos las exposiciones de animales, fauna local y mundial y, por supuesto, la zona de los dinosaurios, donde hay toda una serie de actividades interactivas muy entretenidas, desde una excavación hasta una foto animada con un T. Rex. Se trata de un museo ‘hands-on’, es decir, invita a tocar y experimentar y no solo mirar.
Sábado por fin es el día de la acampada, Julie y Jessica nos recogen en el punto de encuentro y de ahí nos vamos a Killbear, un parque con zona de acampada en la Georgia Bay. El paisaje es majestuoso y hay multitud de lagos, árboles y ardillitas. Por suerte no vemos ningún oso :-D
Nada más llegar Julie nos da de comer (Julie nos da de comer mucho todo el rato!) y después nos bajamos al lago a darnos un baño, jugar al volley y al bádminton y tomar el sol.
Más tarde volvemos para la cena: hamburguesas, y ya por la noche cumplimos con la tradición americana de hacer marshmallows junto a la hoguera.
Una de las cosas que más nos impactan es la cantidad de estrellas que se ven en el cielo lejos de la ciudad.
Domingo por la mañana toca desayuno auténtico: tortitas con sirope, huevos revueltos y bacon y salchichas… Hambre desde luego no hemos pasado. Tras el desayuno nos vamos a otra playa y allí pasamos la mañana y comemos fajitas antes de emprender rumbo a la ciudad.
Y hoy, de nuevo lunes, volvemos a clase cansados pero felices y con ganas de darlo todo porque somos Young Leaders y no hay quien nos pare!
Os mandamos un saludo y os invitamos a seguir nuestras aventuras por aquí.
Hasta pronto!





Somos la mamá y el papá de Daniel, ¡qué guay que es todo esto! Nos alegramos mucho que lo estén disfrutando y aprendiendo al mismo tiempo. Muy buen trabajo esto del blog. Os lo curraís mucho. Besos para todos.